Este retrato me ha costado muchísimo. Por un lado emocionalmente por que bueno, mi padre ya no está y no lo puede ver, y estoy segura de que le gustaría. Y me ha costado mucho hacerle el retrato porque no tenía ninguna foto buena de él. Tengo muchas pero todas de lejos y borrosas, con lo que los que pintan sabrán que es harto difícil hacer un retrato sin un modelo del que copiar o una buena foto. Menos mal que yo a mi padre me lo se de memoria, y por fin he podido hacerlo.
Me dice mi primo Tomás algo sobre el fondo, así que lo voy a contar todo:
A mi padre le encantaba tener jardín pero no le gustaba estar en él y mucho menos cuidarlo, por eso he creado un rincón como a él le gustaba ventanas desde las que contemplar sin estar fuera, creo y así lo he pintado que sería su pequeño paraíso, por eso le he dado tanto protagonismo al entorno, es una parte tan importante como el retrato.
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| Oleo sobre tabla 80x60 cm |
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